18.3.08

A desinfectar

“A desinfectar”, dicen los vigilantes, pero los recluidos intuyen dónde van a conducirles: a ese lugar donde otros fueron llevados antes y ya no regresaron. Se rumorea que hay duchas de las que no cae agua, sino un gas venenoso que acaba con la gente. “A desinfectar”, repiten los vigilantes, y el corazón da un vuelco: el final ha llegado, despídete de todo. Un vuelco de pavor pero también un pálpito: un halo de esperanza, de esto ya se termina. El hambre, la fatiga, las hacinadas celdas, el sudor, las torturas…, todo eso ya se acaba.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

TERRIBLE

saiz dijo...

Gracias por tu visita y comentario.