23.7.07

Y su vida en la garganta

Para componer la Elegía a Ramón Sijé fue imprescindible que muriera su amigo.

Para escribir El niño yuntero o Andaluces de Jaén necesitó ser mordido por la injusticia.

Para idear las Nanas de la cebolla fue preciso que estallara una guerra, que la perdiera, que lo encarcelaran…

Me pregunto qué habría escrito, de haber vivido en paz y feliz.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Igual no habria escrito nada.