-Mira, mamá: he construido un planeta donde brotan unas criaturitas. Y se reproducen y, como en el planeta no hay comida para todas, se fagocitan y engullen las unas a las otras. Y así se pasan la vida. Y luego...
-Hijo, ¿no podrías jugar a otra cosa? No me gusta que te diviertas con juegos tan sádicos.
4.2.09
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2 comentarios:
Pensar que no es un juego. A veces creo que estoy en una pesadilla y que pronto voy a despertar y ver que la realidad en la que nos encontramos es otra,no es la que vivimos.
Yo también tengo esa sensación.
La idea del microrrelato es que el mundo y la vida están tan llenos de arbitrariedades, caprichos y vaivenes que a veces se parece a un juego macabro, a algo elaborado a base de ocurrencias por una mente aburrida. Por alguien que (como un niño) de pronto, y sin pensarlo apenas, hace algo por el mero hecho de hacerlo. No como un proyecto madurado y diseñado, sino como un divertimento o pasatiempo repentino que se le ocurriera para no aburrirse.
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