30.7.08

Ejecución

Será llevado a la silla eléctrica. Estarán presentes las autoridades, algunos familiares de la víctima y los padres del condenado. Se mirarán, estarán a punto de saludarse.

Dos técnicos ajustarán las sujeciones al reo.

Las correas chirriarán (en su idioma): "Nadie va a ganar esta noche. De aquí nadie va a salir victorioso".

Oficina de denuncias

-Vengo a denunciar a aquél que, para cantar la guerra (con tal de versificarla), se inventó aquella milonga del flirt entre Elena y Paris. Vengo a denunciar a él y a toda su escuela.

Pobre gente

Humanos.

Carecían de suprasentidos. No tenían ultracto, ni infrista, ni beyondez. Percibían sólo una zona de lo real. Su conocimiento era sesgado y engañoso. No captaban lo infinito, ni las causas de las causas, ni el porqué de lo adverso. Vivían en la penumbra. Apenas entendían nada.

Tan limitados eran... Pobre gente.

Y entonces los vimos

Avanzamos de continuo en nuestra nave, rectilíneos a través de las galaxias, hasta llegar a la cósmica frontera: los bordes o confines del infinito.

Y entonces los vimos. Allí afuera había dos cachorros de desconocida especie, más grandes aún que el propio cosmos, que traviesamente (como si fueran dos niños con su mecano de piezas imantadas) jugaban a ensamblar un universo.

Re-con-figúra-te

¿Quién, cómo eres ése que se ha despertado?

28.7.08

Artículo único

Con efectos de hoy y a nivel planetario, se prohíben:

-las banderas,

-los escudos,

-los himnos,

por razones probadas y empíricos motivos de higiene psicofísica.

2.222

He leído en un libro (de la época en que aún se imprimían en papel) que hubo guerras dinásticas, guerras de sucesión, varias guerras carlistas, guerra en el 36, terrorismo de eta… Debe de ser ficción: la gente de esos siglos no podía estar tan loca.

22.7.08

Expropiación

Cada verano llegaban carruseles, tiovivos, noria... Pero aquel año vino a la plaza del pueblo un arrancamiento disfrazado de aplomo, de es que soy ya mayor para subir en eso.

17.7.08

Recuerda

Recuerda cosas que nunca ocurrieron.

Recuerda, por ejemplo, que alguien le dijo: "Hagas lo que hagas, te apoyaré siempre".

Recuerda que nadie le comparaba con otros.

Recuerda que, para conseguir lo que quería, no necesitaba disputar, competir.

Nada de eso ocurrió. Nada de lo anterior pasó nunca.

Pero a él le gusta recordarlo.

14.7.08

4 caminos

Era la primera vez que venía a Madrid. Al salir de la entrevista de trabajo me encontré en una plaza. En el rótulo leí “Glorieta de Cuatro Caminos”. Según pude comprobar, los caminos que de ella salían eran, en efecto, cuatro: la calle Bravo Murillo, la calle Fernández Villaverde, la calle Santa Engracia y la avenida Reina Victoria. No sé por qué, tuve la sensación de que, según la calle que en ese momento tomara, me aguardaría una vida diferente. Cuatro caminos, cuatro alternativas, cuatro vidas posibles.

Pasaron las horas, anocheció y ahí seguía yo: inmóvil, como plantada en mitad de la encrucijada de Cuatro Caminos.

Empezó a llover. Un desconocido que pasó a mi lado, al ver mi expresión angustiosa se interesó por mí:

-¿Te pasa algo? ¿Puedo ayudarte?

Protegidos por su paraguas y sin movernos de la plaza, le expliqué lo que me ocurría. Entonces me sugirió pasear juntos por las cuatro calles, deambular por ellas sin ningún orden.

Aquel hombre ya no es un desconocido. De hecho, llevamos diez años viviendo juntos.

13.7.08

Rebelión

De pronto, los papeles se rebelaron. Y cuando alguien iba a escribir "raza superior", "guerra preventiva", "daño colateral", cosas así..., los folios se plantaban: "-Eso yo no lo admito. ¿Entiendes? No lo soporto. Tatúatelo, si quieres, en tu barriga."

Para juzgarme

-Para juzgarme, señores del jurado, pónganse en mi lugar. Pero también, pónganse en el lastre que llevo. Pónganse en mi endeblez. Pónganse en mi turbación... No se pongan sólo en mi lugar.

12.7.08

Procesión

-¿Qué pintas ahí, vestido de ku klux klan, con una cruz de palo, plagiándome? No, hombre: si eso lo hice yo cuando los romanos (aunque te aseguro que no iba vestido así). Vale que te inspires, pero ponle imaginación. ¿No crees que a ti te toca hacer... otras cosas?

2.7.08

Por dentro

Aunque tenía miedo, mostró seguridad, para que así ellos se sintieran seguros.

Aunque estaba angustiada, exhibió alegría, para que así ellos estuvieran alegres.

Y cuando hubo al fin acostado a sus hijos, abrió el sobre, sacó el análisis y, devorándolo a solas, se permitió llorar.